Tatúame,pero en el alma 26
El barco ha llegado a puerto y Karma se ha ido como solo sabe hacerlo alguien con un temperamento envenenado.
Ha dejado al guiri y a la galerista negociando lo que sea que signifique "su futuro brillante" ,porque ha sido ver al estúpido y a su banda y fundirse todo en rojo sangre.
¡Sus sacrosantas muelas!
Tan maravillosas como todo él. La estrella rutilante y tal. La jodida erótica del poder y todos los polvos mágicos que pudiera haberle echado en un futuro ahora tan irrisorio como su porvenir.
Vale que el Keller parece estar en un Éxtasis permanente, a modo de la santa de Ávila pero,en guiri rico de la city.
Hablando del guiri. A vuelto a tirarle la caña. Bueno la caña, los aparejos y toda el Kit del Decathlon para pesca de incautos.
Su yo más resentido le hubiera dejado hacerle una RCP o dos. Su ella racional le sigue diciendo con luces de neón que ella va a ser una muesca "mini" en su relicario de "Folla Ibiza ' 23". Y no es que valore ella mucho lo de ser una más en una amplia lista, no. Es que el Keller. Tiene algo oscuro.
Seguramente ahora estará noqueando a la teutona.
Y Karma rompe a reír en el asiento trasero del cochazo que ya la está dejando a la puerta de su casa.
Y es en ese instante cuando se mira a las piernas que sobresalen de entre las capas de gasa y decide pedir una nueva ruta.
Termina en el Ushaia, entrando por la zona de servicio.
Y va directa a la pecera donde sabe que está el Dios del Trueno, Hans. El Hans.
Y él se alegra de verla y ella le indica con un dedo "ven" en ese gesto tan universal y perentorio.
Y él sonríe y deja varias pistas sincronizadas y va hacia la diosa griega vestida de atardecer.
-¿Dónde lo habíamos dejado, era?
Venga Karma, tú di que sí.¡ Qué un clavo saca a otro clavo!
Y Karma que se enrosca al vikingo y él que la saca de la cabina buscando un poco de intimidad.
Y ella que trepa y no ve más que las ganas de encontrar en esa piel algo.
-¡Buscaros un hotelllll!-escucha que dice alguien en su camino hacia...
Hans ha extendido una mano.Lo sabe porque ha dejado un vacío enorme donde estaba ubicada y abre una puerta.
-Despacio Karmaaaaa. No hay prisa.
Ese acento que se desliza suave sobre las eses y las erres.
Karma que tiene que enfocar la vista porque él ha decidido dejar un espacio enorme entre ambos.
Su cara debe de ser un poema de: "mí no entender"
Hans que se acerca .
Están en un camerino o eso cree , porque ese hombre de cerca , cubre casi la perspectiva del cuarto entero.
Es un portento físico.
-No tienes ni idea del poder que tienes .
Se lo ha dicho con esos ojos de color iceberg mirando fijamente su rostro. Y se ha notado hermosa.
Hans extiende sus manos y dibuja el contorno de su rostro.
-Es como si Picasso, Dalí y Miró se hubieran jugado un "a ver quién conseguía hacer mejor a una mujer".
Karma cree que aquello debe de ser un piropo.
Él deja pequeños besos sobre sus grandes ojos ahumados .
-Tus ojos...
-Ummmm
-Tienen la magia del mediterráneo.
Karma que quiere más.
Hans que sigue dibujando su contorno sin ninguna prisa. ¡Total le están pagando!
-Tu piel suave y del color de las olivas.
Más cerca, Hans.
Ese aliento que la caldea. Hans el vikingo que le recita como si fuera Quevedo,¡ y no el de Bizarrap!
Karma que quiere morderle.
Ella que el romanticismo cree que es algo pretérito.
Hans que lleva esperando por ella tiempo le dice:
-Karma no. Así no.
Y Hans que se va un instante y vuelve.
Le enseña un cinturón de seda y sonríe.
Y Karma que deja de pensar porque se le ha fundido todo el disco duro.
-A mi manera, niña. A mi manera.
Y le ata las muñecas y juega con las capas de gasa hasta que caen al suelo . Lo mismo que las defensas de ella.
¡Así se rinde una de la isla. Sí señor!. Ahora entiende lo del éxito vikingo. Ahora sí.
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