El shootting II (Colaboración con fotógrafo)
Ha pasado el tiempo.
Esta foto está en mi cuarto, sobre mi mesita.
Por la noche, la lámpara proyecta sobre ella ,un haz de luz, que da vida a cada músculo. Lo torna profundo y sinuoso.
Es lo último que veo antes de dormir.
A mí ,vista por ti. Por tus ojos.
He vuelto a aquella habitación, la 409 tantas veces...
Me asaltan fotogramas de lo que vivimos. Trocitos de memoria que me salpican.
O me golpean recuerdos intensos.
Sobre todo si percibo tu olor, o si entre conversaciones perdidas, descubro tu voz ,que sigue portando sonrisas.
El regalo.
Las fotos.
Fueron un acierto para el agasajeado. Y para mí todo un descubrimiento.
No volvimos a mencionar nada de aquello nunca . Como si no hubiera existido.
A veces, hablo conmigo de ti.
Como ahora ,que el silencio es el rey de la casa y estoy sola.
Me he acostado y he encendido la luz.
Miro nuestra foto.
De los dos.
La que creamos juntos.
Elegí ésta,porque recuerdo , que fue de las últimas que disparaste. Antes de enredarnos en nuestras ganas.
Tú sucumbiste ante el encaje o eso creo pensar.
Te pusieron delante una manzana y tuviste que morderla.
Y yo me dejé morder porque era aquel: "ahora o nunca" del que todo el mundo habla.
Nunca más, pero mientras...
Mientras ,aún recuerdo tus labios. Trémulos. Posados sobre la tela.
Fue una caricia más que un beso. Un pedir permiso camuflado entre muchas otras cosas.
Ese irte a buscar.
Con descaro.
Mi cuerpo hablando por mí. Sin pensar o pensándolo todo. De pronto. De golpe...
Ese coger tus manos como amante y no como amiga. Esa súplica silenciosa de necesidad.
Ese cosquilleo en los dedos que se mueren por acariciar. Por descubrir. Por conquistar.
Un no puedo parar, ¡pero frena si te atreves!
Un mar de emociones que llevaban demasiado tiempo en duermevela.
El abrazo de rodillas.
El mirarnos y vernos por primera vez.
Aún recuerdo tus manos dibujando los contornos de mi rostro.
Los besos. Escuetos.
Cientos de ellos contando mis lunares. O eso dijiste después.
Adoraste mi cuerpo. Como nadie, como nunca.
Y fue magia. Y fue sexo pero ...
Hubo más allí.
Respeto. Mimo. Entendimiento.
Complicidad.
Tocamos juntos una melodía tan coordinada que aún pienso que fuese imposible que lo hiciéramos por primera vez.
Cuando hay algo más que hambre, que ganas, que necesidad.
Cuando no importa el tiempo. Los tiempos.
Siempre que leo a Benedetti me hace llorar porque pienso en ti. Pienso en mí contigo y pensar en eso ,pensar en algo imposible ,es como pretender olvidar algo que no existe.
Siempre que veo tus fotografías vuelvo a ti.
Y tú ignorante con tu vida.
Y yo buscando tu recuerdo que vive en cada pedacito de mí.
Olvidaste la cámara a los pies de una cama para darme a mí la pasión que le procesabas a ella.
Fuimos un instante en nuestras vidas.
Fuimos juntos.
Y con eso me quedo.
Comentarios
Publicar un comentario