Orgullo y prejuicio.

 "Todas las batallas de la vida sirven para enseñarnos algo, inclusive aquellas  que perdemos" P. Coelho

Bajarse de un coche un día de lluvia y mojarse los pies.

Pensar en llegar a casa y sumergirte en una bañera llena: de espuma, de sales aromáticas con un atisbo a cítrico. Rodearte de velas que titilen como estrellas y el relajante murmullo del caer pausado del agua que escalda tu piel como una tortura.

He optado por llegar a casa y hacerme un chocolate .

 He comenzado a mirar por la ventana y al ver caer el agua he pensado con tristeza en lo rápido que se va el verano.

¡Y hay gente que prefiere el invierno! exclamo mientras soplo el  chocolate, la única bebida que me gusta beber caliente...

Yo y mi constelación de contradicciones.

Hoy he tenido un sueño.

Al menos la parte que recuerdo de uno que me pilló a duermevela. Entre la consciencia consciente que sabe que en nada tiene que despertar.

Un sueño de verano. claro.

Un sueño de playas de arena blanca y de un mar azul turquesa calmo.

Siempre que tengo sueños bonitos, los tengo en technicolor. Otra de mis anomalías, supongo.

Con un guapo partenaire, por supuesto.¡ Para algo era un sueño y encima mío!

Una elucubración onírica de poca ropa, donde no había ni orgullo, ni tenían cabida los prejuicios.

Un cuadro magistral el que estaba maquinando mi subconsciente, tanto o más, como " La Odalisca" de Ingres, que nunca he entendido muy bien,  pero me tiene hechizada.

Mi sueño inconfesable, pienso mientras me sigo bebiendo el chocolate, era , mientras lo analizo ahora despierta ;un imposible.

Pero claro, ¿qué sueño no lo es ?.

A ver lo de la playa y el mar, es un claro evocar a mi estación favorita del año.

El resto. el adonis, la sirena varada , la falta de ropa o la ausencia total de ella.

El atrezzo de: las caricias, de las miradas. Esa temperatura incendiaria que amenaza con llevarte a la combustión espontánea... 

Esa parte ,la achacaremos a los efectos secundarios de la vacuna, de la  "Moderna". 

Porque la que se toma el chocolate caliente mientras ve llover, nunca ha vivido una escena así en primera persona.

Freud que estás en todas partes, no analices. Please.

No empecemos a hacer terapia de grupo, que ya sabemos lo que pasa con lo de tirar la primera piedra. Que lo mismo te roza ,si tienes suerte , pero lo más probable es que mueras sepultado.

Últimamente tropiezo con visionarios que no entienden la necesidad  que tenemos  algunas personas de escribir. 

De juntar palabras, de amasarlas. 

De intentar que se junten y luego lo que salga sea medianamente apetecible.

Que te entre por el ojo y te llegue a los sentidos.

Ahora mismo sé que el dolor, la pérdida . Lo que conlleva, solo encumbró a los decimonónicos.

Hoy por hoy vende : la carne.

Así sin más  nada.

Escenas tórridas.

Sin demasiada floritura.

 Muy específico.

Simple.

Sin alma.

Puedo ser simplista y llamar al pan pan y al empotramiento contra  una puerta, estocada triunfal.

Pero entenderán que entonces no sería yo.

Mi orgullo es seguir siendo yo y mi prejuicio lo pluralizaría.

Son muchos mis prejuicios.

Lo lamento.

Miren ,¡ no sabrán nunca cuánto!.

Una que lleva escribiendo toda la vida, leyendo y devorando literatura de ésa que no viene en las listas de recomendaciones estudiantiles, ésa ,no puede venir ahora y hacerlo todo elemental.

Poco me conocen. Por no decir que nada.

Si ves que no encajo en tu modus operandi. No insistas.

No te quedes esperando a que se a produzca un milagro.

Soy compleja.

Soy barroca en adjetivos.

Y uso el vocabulario porque me parece que el castellano tiene infinidad de palabras que no deben morir , ni olvidarse, ni dejar de usarse.

Simple tiene un sinónimo que me ha dejado sonriendo: tonto.

Pues si quieres a alguien más simple, aquí no es.

Orgullo y prejuicio.

Un libro precioso. Atemporal.

Como mi sueño de hoy por la noche.

Una pena lo de la vuelta al cole de los enanos.

Una vez más me han dejado en suspense.

Expectante.

Haciéndome gruñir sin abrir los ojos.

Y es que la realidad es eso que pasa mientras otros se empeñan en querer cambiarla.

Yo me he quedado sin sueño, sin adonis y sin final...

¿Sería feliz? 

Pueden dudar de muchas cosas , pero  no hay nada que me guste más a mí, que un buen final feliz.

A buen entendedor...

*Pongan todos los adjetivos que quieran para adornarlo ;)